En nuestro gabinete de psicología en Valencia, especializado en terapia de pareja, apego y traumas, vemos cada día cómo las heridas de la infancia siguen vivas en nuestras relaciones actuales. ¿Alguna vez has sentido que repites los mismos patrones afectivos? ¿Te cuesta confiar, pedir ayuda o sentirte suficiente en una relación? Es probable que tu estilo de apego tenga mucho que ver.
Este artículo está pensado para ayudarte a entender por qué amas como amas, y cómo puedes transformar esos patrones desde el conocimiento y la terapia.
🌱 Todo empieza en la infancia
Desde que nacemos, nuestro cerebro está programado para buscar conexión. No podemos sobrevivir sin un vínculo con quien nos cuida. Ese primer lazo emocional se llama apego, y es el fundamento de cómo nos relacionaremos el resto de nuestra vida.
Cuando hablamos de apego en psicología, nos referimos al vínculo emocional profundo que se forma entre el niño o niña y sus figuras cuidadoras (madre, padre, abuelos u otros adultos significativos). Este vínculo no solo nos sostiene emocionalmente en la infancia: también actúa como una especie de “mapa afectivo” que usaremos, sin darnos cuenta, en nuestras relaciones futuras.
🧠 El apego como plano emocional
A través de ese primer vínculo, aprendemos cosas fundamentales:
- Si podemos confiar en los demás.
- Si es seguro pedir ayuda o mostrar vulnerabilidad.
- Si somos dignos de amor tal y como somos, o si tenemos que “ganárnoslo”.
- Si el amor es estable o algo que desaparece con facilidad.
Este plano emocional, o “modelo interno de funcionamiento”, se instala en nuestro sistema nervioso y guía nuestras respuestas afectivas: desde cómo nos vinculamos, hasta cómo reaccionamos ante el conflicto, la distancia o la cercanía.
🔍 ¿Cuáles son los estilos de apego?
En psicología se reconocen cuatro estilos principales de apego. No son etiquetas rígidas, sino descripciones de patrones que pueden ayudarte a entender tus reacciones emocionales y vinculares:
1. Apego seguro
Las personas con apego seguro suelen sentirse cómodas tanto con la cercanía como con la autonomía. Saben que pueden contar con los demás, y también confían en su capacidad para sostenerse emocionalmente. Son capaces de expresar sus necesidades sin miedo, establecer límites y construir relaciones equilibradas.
2. Apego ansioso
Este estilo nace cuando el cuidado recibido fue inconsistente o impredecible. Como resultado, la persona busca constantemente validación y teme el abandono. A menudo, hay una fuerte necesidad de cercanía, combinada con un miedo intenso a ser rechazada o no ser suficiente.
Frases típicas: “¿Y si ya no me quiere?”, “Me ignora, seguro hice algo mal”, “Necesito saber que me quiere, todo el tiempo”.
3. Apego evitativo
El apego evitativo suele desarrollarse en contextos donde las emociones no fueron bien recibidas o donde se valoró excesivamente la autosuficiencia. Estas personas suelen desconectarse de sus necesidades emocionales, evitan la intimidad y dan mucha importancia a la independencia.
Frases típicas: “No necesito a nadie”, “Prefiero resolverlo solo/a”, “Cuando alguien se acerca demasiado, me agobio”.
4. Apego desorganizado
Este es el estilo más complejo y doloroso. Suele estar vinculado a situaciones de trauma, abuso o negligencia severa. Hay una contradicción interna: se desea el amor, pero al mismo tiempo se le teme. El resultado es una montaña rusa emocional: intensidad, caos, miedo a perder y a ser amado/a al mismo tiempo.
Frases típicas: “Te necesito, pero no sé si puedo confiar”, “Quiero amor, pero me siento atrapado/a”, “Siempre acabo en relaciones destructivas”.
🪞 ¿Y para qué sirve conocer tu estilo de apego?
Saber cuál es tu estilo de apego no es para etiquetarte, ni para justificar tus acciones. Es una herramienta de autoconocimiento poderosa que te ayuda a:
- Comprender por qué reaccionas como reaccionas en tus relaciones.
- Detectar patrones repetitivos que generan sufrimiento.
- Entender tu miedo al abandono, tu dificultad para vincularte o tu necesidad de control.
- Dar un sentido a tus emociones intensas o tu desconexión emocional.
- Aprender a comunicar lo que necesitas de forma más clara y sana.
💛 La buena noticia: el apego se puede transformar
Aunque tu estilo de apego se forjó en la infancia, no estás condenado/a a repetir para siempre los mismos patrones. El cerebro humano tiene una cualidad maravillosa: la neuroplasticidad. Esto significa que, en contextos de seguridad emocional, puedes crear nuevos caminos, nuevas formas de vincularte, más conscientes y amorosas.
En terapia, especialmente cuando se trabaja con enfoque en apego y trauma, podemos:
- Explorar tu historia relacional sin juicios.
- Comprender cómo esa historia impacta tu presente.
- Trabajar tus reacciones emocionales en pareja o en relaciones cercanas.
- Fortalecer tu autoestima y tu capacidad de regular tus emociones.
- Cultivar nuevas formas de estar en el mundo: con más calma, más seguridad y más confianza en ti y en los demás.
🤝 Terapia de pareja y apego: un enfoque integrador
En nuestro gabinete de psicología en Valencia, acompañamos tanto procesos individuales como de pareja desde este enfoque. Entendemos que muchas de las crisis relacionales no son el resultado de “falta de amor”, sino de heridas no resueltas que se activan en la intimidad.
Por eso, en las sesiones de terapia de pareja trabajamos con:
- Los estilos de apego de cada uno.
- Las heridas emocionales que se activan en la relación.
- Nuevas formas de comunicación empática.
- La creación de un espacio seguro donde ambos puedan sentirse vistos, valorados y comprendidos.
📍 ¿Buscas un gabinete de psicología en Valencia especializado en apego, trauma y relaciones?
Si sientes que tus vínculos te generan angustia, si repites patrones que no entiendes o simplemente quieres empezar un proceso de autoconocimiento profundo, podemos ayudarte.
📩 Escríbenos para una primera sesión informativa.
💬 También puedes contactarnos para sesiones de terapia individual o de pareja.
💻 Visita nuestra web y conoce más sobre cómo trabajamos desde un enfoque integrador y respetuoso.
